Los altos precios de los combustibles, los costos de la materia prima en el mercado internacional y el aumento en los valores de bienes y servicios básicos de la población son causas que influyen en que los comerciantes vean afectadas sus ventas y sus ingresos.
Así lo afirman los dirigentes comerciales de República Dominicana, quienes muestran preocupación por el alza de precios de las materias primas en el mercado global, que se reflejan directamente en el aumento de los valores de los alimentos y productos industrializados para el consumo de la gente.
Ante la situación, el dirigente de la Federación Nacional de Comerciantes Detallistas de Provisiones, Fausto Figuereo, entiende que “el dinero de la población no alcanza” para abastecerse de los productos de la canasta básica, que supera los RD$33,000 mensuales.
El alza en los costos de los productos obliga a los comerciantes a invertir entre un 30% y 35% más de capital para mantener el inventario en los mismos niveles de volumen de 2019, antes del coronavirus, en los pequeños y medianos comercios dominicanos.
Sector agropecuario
En 2021 el Gobierno destinó RD$1,600 millones a los productores dominicanos para contrarrestar el aumento de los precios de los fertilizantes y los agroquímicos en el mercado mundial y el incremento del costo de los fletes.
Un año después, para garantizar la estabilidad de precios, el presidente de la Federación Dominicana de Comerciantes (FDC), Iván García, considera necesario que el Gobierno siga subsidiando a los productores.
El empresario asegura que, de esta forma, se evidenciaría en la sociedad que el sector comercio “no tendrá temor” de que los precios de los artículos productivos aumenten. Sin embargo, afirma que los productos agrícolas cultivados en el país podrían mantener sus precios estables.
De acuerdo con el rastreo de productos alimenticios 2022 del Instituto Nacional de Protección de los Derechos del Consumidor (ProConsumidor), durante la semana pasada los rubros como la papa se comercializan por RD$14 la libra; la yautía es vendida por RD$35, mientras que la unidad de plátano se cotiza entre R$5 y RD$6, en el caso del plátano barahonero la unidad varía desde RD$12 hasta RD$13.
El dirigente comercial Figuereo entiende que República Dominicana tiene la ventaja de producir rubros agrícolas y frutos menores a gran capacidad para abastecer la dieta alimenticia de la población, factor que influye en que se mantengan los precios de productos como vegetales, víveres y frutas.
Aunque por momentos ha escaseado la materia prima importada, el expresidente de la Federación Nacional de Comerciantes de la República Dominicana (Fenacerd), Ricardo Rosario, reconoce la “actitud nacional” de fomentar la producción de rubros agropecuarios y agroindustriales en tiempos de pandemia para suplir la demanda alimentaria de la población.
Inflación
Cuando la economía dominicana parecía entrar en 2021 en una etapa de recuperación tras los embates del coronavirus, la inflación medida por el índice de precios al consumidor cerró en 8.5%, según los datos del Banco Central (BCRD), lo que afecta a la población al tener que modificar su presupuesto financiero a la situación socioeconómica, y a los comerciantes que se ven obligados a aumentar los precios que inciden en el consumidor final.
Rosario afirma que los comerciantes “estamos preocupados de que el fenómeno de la inflación importada siga amenazando los precios” durante este 2022, lo que afecta directamente al consumidor final.
El comercio marítimo ha sido fuertemente golpeado por el coronavirus, dejando repercusiones en el manejo de oferta y demanda de los fletes. Los contenedores que llegan a República Dominicana desde China cuestan hasta US$18,000, cuando en el año 2019 tenían costos entre US$1,000 y US$1,500.
En tanto que los fletes procedentes de la Eurozona pasaron de US$3,000 a US$11,400, es decir, un aumento neto de 280% (US$8,400). Sin embargo, el presidente de la FDC asegura que en la actualidad los fletes provenientes de Europa cuestan en promedio US$4,000, costo que reduce la carga económica de los productos importados de la zona europea.
Sector industrial
Los materiales de construcción continúan sufriendo alzas en sus precios, producidas en gran parte por la crisis en el comercio marítimo y el aumento de precios de la materia prima internacional.
El dirigente comercial García plantea que debido a la situación que atraviesa el mercado global, las autoridades “deben manejar con mucha prudencia los costos” para que no se disparen los precios al consumidor.
La funda de cemento que costaba RD$390 vale RD$450; el quintal de varilla tuvo un aumento de RD$500, al pasar de RD$3,000 a RD$3,500. Mientras que los blocks de seis pulgadas, que costaban RD$38 oscilan entre RD$40 y RD$45.
García aclara que los comerciantes de madera y productos electrónicos importados desde China abogan para que el costo de los contenedores se reduzca un 50% y así comenzar a sentir una estabilidad de precios.
Para República Dominicana el sector construcción es uno de los principales ejes que dinamiza la economía y se ve impactado por el alto costo de producción en el mercado internacional. “Nuestra preocupación está en los artículos industrializados y productos que se importan por el alto costo de los fletes”, aseguró García.
Covid-19
El presidente del Consejo Nacional de Comerciantes y Empresarios de República Dominicana (Conacerd), Antonio Cruz Rojas, expresó que estar en crisis sanitaria es el punto clave para el aumento de precios que incide en la economía de los dominicanos, quienes se ven afectados por el alto costo de la vida.
El ejecutivo mencionó como problemas puntuales en el aumento de precios la falta de producción por la escasez de mano de obra para bienes y servicios; el alza del petróleo, que cuesta en promedio US$85 por barril; el alza de la tasa del dólar, que vale US$1 por RD$57; para que el presupuesto monetario de las familias disminuya a la vez que la canasta básica se hace “más cara”.
No obstante, el empresario afirma que los comerciantes “no deben tener temor” a que los precios aumenten, mientras el mundo esté en pandemia, ya que es una situación social y económica incierta.