El presidente Luis Abinader condecoró al empresario y embajador Frank Rainieri con la Orden del Mérito de Duarte, Sánchez y Mella en el Grado de Gran Cruz Placa de Plata.

Rainieri recibió la distinción en reconocimiento a sus más de cinco décadas de contribución al desarrollo del turismo en el país y a su labor solidaria como representante de la Soberana y Militar Orden Hospitalaria de San Juan de Jerusalén, de Rodas y de Malta en República Dominicana.

El empresario destacó que no inició su carrera esperando reconocimientos, sino con la esperanza de dejar una huella positiva en el país.

Recordó sus primeros trabajos sociales en comunidades como Cambita, La Cuarenta, Sabana de San Juan y San José de Ocoa, experiencias que, como dijo, marcaron su manera de ver el mundo y le enseñaron «el valor universal de la solidaridad».

«Aprendí, por convicción y por enseñanza de mi padre, que la verdadera dignidad no se mide por lo que uno tiene, sino por lo que uno es capaz de dar», expresó.

Manifestó que «ser empresario en nuestro país no es tarea fácil, pero sí profundamente gratificante. He sido testigo de cómo la República Dominicana ha crecido, fortalecido su democracia y abierto espacio para más personas».

Sostuvo que el turismo es un motor fundamental del desarrollo nacional y destacó el papel del sector privado en la generación de empleos, la atracción de inversiones y la confianza en el país.

«Los sacrificios y las decisiones difíciles se compensan con la satisfacción de ver un país que avanza», dijo, al tiempo que consideró que la condecoración que se le otorgó es «una invitación a seguir creyendo y construyendo un país más justo, inclusivo y fuerte», según Diario libre.

En el acto que estuvieron presente tambien la primera dama, Raquel Arbaje y el canciller Roberto Álvarez, este último destacó que la visión y tenacidad de Ranieri impulsaron el proyecto turístico de Punta Cana, y el apoyo en la preparación de la X Cumbre de las Américas que se celebrará en Punta Cana en diciembre de este año.