Santo Domingo, RD
La llegada de la variante omicron a territorio dominicano es inminente, por lo que junto a la ya existente variante delta, en medio de la eliminación de las restricciones, pueden crear situaciones muy difíciles y disparar los indicadores epidemiológicos del país como ocurrió el año pasado tras las fiestas navideñas.
Así lo alertó ayer el científico dominicano residente en Doha, Qatar, Rubén Peralta, quien llama a República Dominicana a mantener bien activa las medidas de prevención, hacer mucho más pruebas diagnósticas y rastreo de casos, así como la secuenciación oportuna de las variantes.
Dice que el relajamiento de las medidas de restricción de un país en tiempos feriados de navidad y año nuevo es una estrategia riesgosa que se repite.
Peralta entiende que República Dominicana debe tomar medidas estratégicas basadas en la identificación del virus SARS-CoV-2 y secuenciación de la variante predominante del momento que es la delta y la inminente llegada de la nueva variante ómicron, de la cual hay indicios de tener una alta tasa de infectividad.
El reconocido médico destaca que según reportes internacionales, en República Dominicana aproximadamente un 51% de la población ha recibido la segunda dosis de la vacuna contra la COVID-19, indicando que una gran parte de la población no se ha beneficiado de la protección adquirida por la inoculación contra el virus.
Alto riesgo
Entiende que de continuar el relajamiento de las medidas epidemiológicas contra la pandemia como lo han anunciado las autoridades sanitarias, sumado al incremento de actividades sociales, flujos de turistas y familiares que residen en el exterior visitando a sus allegados y amigos por la época navideña, el país tomaría el riesgo innecesario de que se disparen los indicadores epidemiológicos de la pandemia como ocurrió en el pasado feriado navideño y de fin de año, impactando de nuevo en la salud pública, el turismo y la economía nacional.
“En el país, continuamos atravesando por un período relativamente lento en el programa de vacunación lo que pone en riesgo a una gran porcentaje de la población ante la agresividad y el contagio de las nuevas variantes circulando, entre ellas la delta que es la predominante actualmente”, dijo.
Campaña más creativa
El académico y cirujano dominicano entiende que el país debe rediseñar una campaña de vacunación más creativa y comunitaria para estar mejor preparado de la llegada inminente de la nueva variante ómicron, la cual hasta la fecha con la poca evidencia que se ha publicado, es más contagiosa que la variante Delta, pero las manifestaciones clínicas de la mayoría de casos reportados han sido leves especialmente en los pacientes vacunados.
El doctor Peralta señala que todavía existe un gran porcentaje de la población vulnerable que no ha recibido la segunda dosis de la vacuna contra el COVID-19, y “estamos lejos del 75% al 85 % requerido para obtener inmunidad colectiva en relación con la variante predominante del momento: la variante delta”, señala el estudioso de la medicina, al citar como fuente a Our World in Data”.
Recomienda métodos de mitigación
Entre sus recomendaciones al país figuran que además de incrementar y completar el esquema de vacunación de dos dosis de la población y obtener sobre un 80% de vacunados, se debe continuar con el programa de refuerzo o tercera dosis en la población mayor de 16 años.
En las actividades cotidianas, sugiere además, usar los métodos de mitigación, como el uso de mascarillas, evitar las aglomeraciones y multitudes y los espacios poco ventilados
Como ejemplo de las medidas que deben establecerse y fortalecerse citó el mandatario de mascarillas en lugares al interior: públicos y privados, oficinas y en lugares al aire libre debido por la baja tasa de vacunación que aún se mantiene y requerir certificados de vacunación comprobada al entrar en establecimientos públicos, actos sociales.
También, reducir las aglomeraciones en estadios y conciertos y otras actividades masivas; incrementar las actividades de identificación con el aumento significativo de pruebas y rastreos de los casos positivos; continuar cuarentena y aislamiento obligatorio de casos sospechosos o positivos y tratamientos e internamientos gratuito a los infectados que ameriten manejo clínico.