Los conflictos recientes suscitados en los últimos días se originan porque los taxistas regulares rechazan la operación de los Uber por no estar registrados como ellos, lo cual no le permite al Cuerpo Especializado de Seguridad Turística (Cestur) saber exactamente quién transportó a un turista en caso de ocurrir algún incidente.
Por otro lado, los choferes de las aplicaciones móviles alegan que el problema es la gran diferencia en las tarifas, ya que con ellos es más económica y más rápida.
La viceministra de Gestión de Destinos, la licenciada Patricia Mejia, en representación del ministro David Collado junto al general Juan Carlos Torres Robiu, Policia Nacional e INTRANT, fijaron una contundente posición donde le exigieron a la Federación de Taxis Dominicana con la participación de Asotatupal, Veron Taxi, Siutratural
y delegado nacional de la Federación, poner control inmediato a todos los casos de violencia y paralizar este tipo de conflictos que aturden el desarrollo turístico en plena reactivación económica y acelerado crecimiento.
Las autoridades dijeron que Uber, por lo pronto, deberá seguir operando con limitaciones mientras cumpla con los requisitos legales que exige el INTRANT, manteniendo la distancia del perímetro establecido legalmente sin acceder a las estructuras hoteleras como les compete legalmente a la Federación de Taxis Dominicana.
Por su parte, la Federación de Taxis Dominicana se comprometió a manejar cualquier tipo de novedad o inconvenientes para mantener un ambiente seguro y confiable entre los visitantes turísticos y los servicios dados.