Air Europa cerro el pasado año 2021 con casi 1.000 millones de dólares en deuda, una piedra más en el camino para su adquisición por parte de Iberia.

En concreto, y según los datos de informe de cuentas depositado en el Registro Mercantil al que ha tenido accesoelEconomista.es, el pasivo de la compañía se ha disparado hastasuperar los 992 millones, lo que supone multiplicar casi por cuatro la deuda que tenía la compañía al cierre de 2019, justo después de que se anunciase el acuerdo de compra-venta y casi duplicar la del cierre de 2020, con la que se renegoció el precio de la operación la primera vez.

Más allá de la deuda, la aerolínea de la familia Hidalgo finalizó el ejercicio 2021 con unas pérdidas de 304,36 millones de euros, cifra que hay que sumar a los 427,7 millones de números rojos con los que finalizó 2020, el peor año del Covid.

Esto lleva a un patrimonio neto negativo por importe de 659,8 millones. Además, sus pasivos corrientes superan a sus activos corrientes en 166,737 millones como consecuencia de la paralización de actividad que causó la pandemia, a pesar de que se ha ido recuperando gradualmente durante el ejercicio 2021.

De acuerdo con el informe del auditor, KPMG, que fue firmado el pasado 18 de julio, la dirección de la aerolínea ha preparado un presupuesto de tesorería que se ha ido actualizando en función de la evolución de los acontecimientos.

Según el documento, los administradores consideran que cuentan con suficiente liquidez para seguir operando en el futuro previsible por lo que han decidido mantener el principio de empresa en funcionamiento a la hora de formular las cuentas.

Pese a ello, la big four señala que «aún existen incertidumbres que podrían llevar a tener que contar con mayor financiación ante escenarios más adversos», por lo que la presencia de dichas incertidumbres materiales pueden «generar dudas significativas sobre la capacidad».