El espacio estratégico de gobernabilidad denominado como “Compromiso Puerto Plata”, quedó oficialmente instaurado este jueves, durante un encuentro realizado en el despacho de la vicepresidente de la República, Raquel Peña, y en el que participó además el ministro de la presidencia, José Ignacio Paliza, y Andrés Bautista, ministro administrativo de la presidencia, a quienes se les presentó una agenda de temas prioritarios para el desarrollo integral de esta provincia.
“Compromiso Puerto Plata” es un instrumento de concertación y diálogo, que aglutina a líderes empresariales de esta ciudad y a la iglesia, para en alianza con el Estado, dar seguimiento a los puntos de vital interés para lograr el franco rendimiento de los sectores económicos locales.
La entidad está conformada por Birgitt Heinsen por el Clúster Turístico del Destino Puerto Plata, Mileyka Brugal, por Cámara de Comercio y Producción de Puerto Plata y la Corporación de Zona Franca, César José de los Santos, representando a la Asociación de Propietarios de Hoteles y Condominios de Playa Dorada, Luis López, a la Asociación de Hoteles y Restaurantes de Sosúa y Cabarete, Carlos Rodolí, por la Asociación de Hoteles, Restaurantes y Empresas Turísticas del Norte (ASHONORTE), Guillermo Pérez, del Sector Construcción, Luis Caraballo, sector Alimentos y Bebidas, Juan de Jesús Tatis, por el Bloque Intermunicipal para el desarrollo de la parte Oeste Puerto Plata (BIDEMO) y Monseñor Julio César Corniel, Obispo de la Diócesis de Puerto Plata.
Este encuentro, a solicitud del presidente de la República, Luis Abinader, propició la exposición de temas prioritarios y la motivaciones de otras necesidades ya planteadas en otros escenarios, que requieren seguimiento y ejecución, para lograr el avance sostenido de Puerto Plata, en materia de tránsito terrestre, conexiones viales, ordenamiento vial, saneamiento de áreas de alto valor turístico, suministro de agua, remozamiento de zonas turísticas, entre otras necesidades.
Este espacio ciudadano promueve un enfoque inclusivo y participativo, en el que las instituciones involucradas alcanzan consensos que reflejan las prioridades de los habitantes locales. La creación de una agenda única y consensuada permitirá que las decisiones sean representativas de las necesidades reales de la provincia, garantizando una mayor efectividad en la toma de decisiones por parte de las autoridades.